Los beneficios de la práctica de sexo en general son muchos y, en la tercera edad, también. Libera endorfinas, ayuda a reducir el estrés, mejora la autoestima, y podrían seguir enumerándose. Cumplir años no debe ser un motivo para djar de disfrutar de las relaciones sexuales y privarse de todos sus beneficios.
El sexo en la vejez previene enfermedades cardiovasculares, del corazón y de la piel.Practicar sexo en la tercera edad puede ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares y disminuir el riesgo de problemas de hipertensión. En los hombres, además, puede ayudar a reducir las probabilidades de cáncer de próstata, ya que la actividad sexual hace aumentar el flujo sanguíneo. Pero el sexo no deja de ser una actividad física, por lo que puede afectar positivamente al corazón, sobre todo al mejorar el flujo sanguíneo. Dicha mejora del ritmo cardíaco puede reducir las probabilidades de sufrir problemas cardiovasculares, como taquicardias o infartos de miocardio, así como reducir riesgos de hipertensión. Además, la práctica de sexo ayuda a liberar un gran número de hormonas, como las endorfinas o las hormonas del crecimiento. Estas últimas afectan a la piel, dándole más elasticidad y haciendo que se vea más joven.
El sexo entre mayores calma el dolor y ayuda al descansoEsa liberación de hormonas, como las endorfinas o la oxiticina, tienen beneficios también en el cuerpo. Y es que dichas sustancias producen efectos de felicidad y bienestar, así como anestésicos, de manera que el sexo puede mitigar dolores corporales, ayudar a relajarse y, por lo tanto, a descansar y dormir mejor.