Las lúnulas, esas pequeñas medias lunas blanquecinas en la base de las uñas, pueden revelar señales de alerta sobre posibles problemas de salud. Estas estructuras forman parte de la matriz ungueal, la región responsable del crecimiento de las uñas, y su apariencia puede cambiar por diversos factores, desde trastornos circulatorios hasta enfermedades sistémicas.¿Por qué algunas personas tienen lúnulas más grandes y otras apenas las notan? ¿Qué significa si se vuelven más oscuras o si desaparecen por completo? En este artículo, exploraremos qué función cumplen las lúnulas, qué alteraciones pueden experimentar y qué condiciones de salud podrían indicar. Además, te daremos ejemplos concretos y recomendaciones para identificar cuándo es prudente consultar a un médico.
¿Cómo es la lúnula normal?
El color normal de la lúnula es blanco. Su característico tono claro se debe a que estas células aún no han completado su proceso de queratinización, lo que las hace más jóvenes, menos compactas y de apariencia más pálida.En el pulgar, suele ocupar aproximadamente el 25 % del largo total de la uña. No obstante, disminuye su proporción en el resto de los dedos, a medida que nos acercamos al meñique.No todas las personas tienen lúnulas visibles y eso es normal. Los factores genéticos pueden determinar que se modifique su tamaño y su tonalidad, siempre dentro de la gama de los blancos.