Algunos síntomas de daño hepático son:Ictericia: La piel y la parte blanca de los ojos se vuelven de color amarillento. Hinchazón: El abdomen, las piernas o los tobillos pueden hincharse. Dolor abdominal:
Se puede sentir como una molestia, una sensación palpitante o punzante en la parte superior derecha del abdomen. Orina oscura: La orina puede ser de color oscuro o turbio. Heces claras:
Las heces pueden ser de color claro. Pérdida de peso: El apetito puede disminuir y se puede perder peso de forma rápida y sin proponérselo. Náuseas y vómitos: Se pueden presentar náuseas o vómitos. Comezón en la piel: La piel puede presentar comezón. Cansancio:
Se puede sentir cansancio constante. Aliento con olor dulce: El aliento puede tener un olor dulce o a humedad. Desorientación: Se puede sentir desorientación o confusión. Somnolencia
: Se puede sentir somnolencia. A veces no hay síntomas. Las formas leves de hepatitis tóxica pueden no provocar síntomas y detectarse únicamente con análisis de sangre.